domingo, 8 de julio de 2012

“El Plan De Felicidad.” [Mensaje]

Artículo citado del site de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.


“El Plan de Felicidad”

Por Élder Daniel A. Moreno - De los Setenta.

"No existen condiciones ideales; existen oportunidades, y hay que tomarlas y aprovecharlas. Si lo hacemos, cumpliremos el propósito de Dios en nuestras vidas y llenaremos la medida de nuestra creación." 

Voy a comenzar dándoles una mala noticia: “Las condiciones ideales no existen”. Lo que existe son oportunidades. Y muchas veces en un contexto que nos resulta adverso. Sin embargo hay personas que esperan que las condiciones sean ideales para hacer algo. Por ejemplo: “Me voy a activar cuando releven al Obispo Fulano de Tal”; “Voy a comenzar a pagar los diezmos cuando tenga un mejor trabajo”; “Cuando me gradúe nos vamos a casar”; “Cuando edifique la otra pieza vamos a encargar un hijo”; etc., etc.

Pero las condiciones ideales no existen y podemos pasarnos toda una vida esperando sin que nunca lleguen.

Las condiciones ideales no existieron para Nefi, tampoco para José Smith. No existen para nadie.

Examinemos un poco la historia de Nefi. ¿Tenía problemas?, por supuesto que tenía problemas, de afuera y de adentro; problemas con Labán, con sus propios hermanos que lo sometían a todo tipo de abusos; a veces consigo mismo, ya que más de una vez hacía un análisis introspectivo en el que tomaba cuenta de sus debilidades. Sin embargo Nefi escribe en el primer versículo del primer capítulo de su primer libro: “siendo, no obstante, altamente favorecido del Señor todos mis días”. Aunque en realidad podemos llegar a pensar en varios días de la vida de Nefi en los cuales la pasó muy mal, como cuando le pegaban sus hermanos o le ataban al mástil del barco o la angustia que le producía la desobediencia de ellos.

Sin embargo Nefi dice: “favorecido del Señor todos mis días”.

Para José Smith tampoco fue tarea fácil la que le asignó el Señor, en condiciones tan adversas. Con poca instrucción al comienzo. Sumido en la pobreza. Teniendo que trabajar arduamente a diario para su sustento. Perseguido, encarcelado, torturado y finalmente asesinado. Si a eso le sumamos tragedias familiares como el fallecimiento de sus mellizos poco después de nacer, el cuadro está completo.

Hoy en día, los líderes y apóstoles no se ven libres de las dificultades; se enferman, muchas veces gravemente, también pasan por la experiencia purificadora del dolor.

No hay condiciones ideales, pero hay oportunidades. Sin embargo, muchos de nosotros a veces esperamos, al igual que los romanos de la antigüedad, que los hados nos sean propicios. Cuando en realidad, citando a Donald Kendall, director ejecutivo de Pepsi Co., “El único lugar donde el éxito viene antes que el trabajo es en el diccionario”.

A veces vemos a personas exitosas, las admiramos, en cierto modo las envidiamos y deseamos estar en su lugar, ser como ellos. Pero pasamos por alto el hecho que para llegar al éxito, esas personas han recorrido un largo camino de trabajo, esfuerzo, errores, fracasos, frustraciones y reveses de la vida. Han pagado un precio.

Lo que realmente necesitamos es un PLAN.
Durante 5 años de mi vida serví como misionero. Dos años como joven y tres años como presidente de misión. Y siempre le hablábamos a las personas que Dios tiene un plan. Cuando joven le llamábamos EL PLAN DE SALVACIÓN (por supuesto lo sigue siendo), en la actualidad los misioneros lo llaman EL PLAN DE FELICIDAD. Pero es un plan. Un plan para cada uno de nosotros. Es vernos en nuestro estado actual y visualizar lo que podemos alcanzar si somos fieles; aún llegar a ser como Dios.

Para muchas religiones esto puede sonar como una herejía, pero para nosotros es una verdad sublime, que un hijo espiritual de Dios, al igual que un niño que crece para parecerse a su padre, tiene la capacidad de crecer en espiritualidad hasta alcanzar los atributos de la divinidad.

Es como sacar una foto de cómo nos encontramos ahora y después imaginarnos un escenario futuro de dónde queremos estar. Y entonces trazar un plan que nos lleve a ese punto.

Henry Ford dijo: “Sea que pienses que puedes o que no puedes, estarás en lo cierto”.

Todo plan necesita pasos a seguir, etapas, plazos, seguimiento y personas que servirán de ayuda y sostén. Pueden haber demoras, inconvenientes, cosas que ocurren en la vida y que son ajenas a nuestros deseos y voluntad, pero el aferrarse al plan y seguirlo (con los ajustes que a veces son necesarios), es lo importante.

Si bien nuestro plan incluirá hitos importantes que son comunes a todos, el mismo plan no sirve para dos personas diferentes. Cada uno debe hacerlo a medida, ajustándolo a sus necesidades y deseos.

No existen condiciones ideales; existen oportunidades, y hay que tomarlas y aprovecharlas. Si lo hacemos, cumpliremos el propósito de Dios en nuestras vidas y llenaremos la medida de nuestra creación.

 

Fuente del mensaje: Mensajes Líderes del Área - Artículo en PDF (con varios artículos).

Bio Elder Daniel A. Moreno: Casado con Alicia Colombo.  Hijos: Andrés, Pablo y Débora. Hijos políticos: Virginia, María Laura y Sergio. Nietos: Pablo, Catalina, Pedro, Tomás, Juan, Lucas, Federico y Sol.

Llamamientos anteriores: - Presidente de la Misión Bolivia Cochabamba -Presidente de la Estaca Rosario Argentina Norte - Obispo del Barrio Juncal, Estaca Buenos Aires Argentina Belgrano - Obispo del Barrio La Florida, Estaca Rosario Argentina Norte - Obispo del Barrio Parque Urquiza, Estaca Rosario Argentina -Misionero de tiempo completo, Misión Argentina del Norte

Ocupación: Gerente de Servicios de Bienestar del Área Sudamérica Sur

Educación: Licenciado en Administración de Empresas. Maestría en Administración de Empresas (MBA)

Fuente de la Bio: Noticias Locales – La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.

 

© 2008 - Diseñado por doxs | templates - todos los derechos reservados